Summary: 1 REYES 22. DISCERNIR EL MENSAJE DE LOS HOMBRES. 3 … el rey de Israel…4 … se dirigió a Josafat y le preguntó: ¿Saldrás conmigo a la batalla para recuperar Ramot de Galaad? ¡Por supuesto! contestó Josafat al rey de Israel. Tú y yo somos como uno solo… 5 … Pero primero averigüemos qué dice el SEÑOR. 6 Así que el rey de Israel convocó a los profetas, unos cuatrocientos en total, y les preguntó: ¿Debo ir a pelear contra Ramot de Galaad o desistir? Todos ellos contestaron: ¡Sí, adelante! El SEÑOR dará la victoria al rey. 7 Pero Josafat preguntó: ¿Acaso no hay también un profeta del SEÑOR aquí? Debemos hacerle la misma pregunta. NTV. Después de tres años de paz entre los sirios y el reino de Israel, el monarca israelí, concibió la idea de liberar a la ciudad Ramot de Galaad que estaba en manos de los sirios, al oriente del Jordán. Ben-adad tras su captura, había prometido devolver las ciudades de Israel que habían sido capturadas por los sirios, cuando recibió amnistía de Acab. Pero pasado los años, Ben-adad el rey sirio, no había cumplido con su promesa, Ramot de Galaad seguía bajo el dominio sirio. Ramot de Galaad o Ramá, fue una de las ciudades de refugio al este del río Jordán en Galaad, en el límite septentrional de Gad, el hogar de Jefté, era una tierra fértil para la agricultura. Esta ciudad fue construida como uno de los centros administrativos claves en el reino de Salomón. A esta ciudad se la identifica con Tell er-Rumeith, al norte de Transjordania. Es una colina de tres cumbres situada a varios kilómetros al sudeste de Ramta. Su ubicación estratégica la hacía importante desde el punto de vista de su dominio del comercio en tiempo de paz y de los movimientos de tropas en tiempo de guerra. Acab, cuando su homólogo de Judá estuvo de visita en Samaria, le comprometió para que le ayudara a recuperar la ciudad de Ramot de Galaad en manos de los sirios. Josafat, el monarca del reino del sur, aceptó la propuesta de su consuegro Acab. Pues su hijo Joram estaba casado con Atalía, la perversa hija de Acab y Jezabel. Josafat, hombre temeroso de Dios, antes de salir a la batalla, sugirió a Acab que consultara al eterno Creador por medio de los profetas. Consultar a los profetas era costumbre del pueblo hebreo. Acab bajo la sugerencia de Josafat convocó a cuatrocientos de sus profetas para que corroboraran sus decisiones, pero estos profetas no eran verdaderos profetas de Dios. Estos hombres no eran levantados por Dios para ejercer el ministerio profético, ellos eran llamados por el rey para ejercer la profesión. Por eso, su lealtad y su servicio se debían a un hombre, no a Dios. Una clara indicación de esto fue su actuación delante de Acab, prediciendo lo que él quería que predijeran. Josafat, acostumbrado a la genuina voz profética del eterno Creador, reconoció que aquellos cuatrocientos profetas de Acab no eran verdaderos profetas del Señor, y quería consultar a algún verdadero profeta. Y preguntó a Acab: ¿Si no había en el reino del norte, un verdadero profeta de Yahvéh?” Josafat sabía que había una diferencia entre estos profetas paganos y el "profeta de Dios". Era evidente que Josafat quería hacer lo correcto ante su Creador. Queridos hermanos, el rey Josafat, ante la profecía presentada por los profetas de Acab no quedó conforme, pues sabía que esa profecía no procedía de su Creador a quién obedecía y servía. Josafat quería escuchar la verdadera profecía para salir a la batalla, por eso, hizo que Acab convocara a un verdadero profeta de Dios. En la actualidad al igual que en el pasado, hay muchas personas que dicen ser siervos de Dios, pero sus palabras no provienen del único Dios verdadero, sus palabras provienen de los deseos perversos de sus corazones, para engañar a las personas y apartarlas del camino de la salvación, y la vida eterna. Hermanos, al igual que Josafat, no debemos creer a cualquier persona que diga venir de parte del Señor, debemos analizar el mensaje de esas personas a la luz de la Biblia, solo así, --- Send in a voice message: https://podcasters.spotify.com/pod/show/jesus-is-life1/message
