Summary: 2 REYES 3. TODA CULPA ES DEL HOMBRE. 9 … los tres ejércitos dieron un rodeo a través del desierto durante siete días; pero no había agua para los hombres ni para los animales. 10 ¿Qué haremos ahora? clamó el rey de Israel. El SEÑOR nos ha traído a los tres aquí para que el rey de Moab nos derrote. 11 Pero el rey Josafat de Judá preguntó: ¿Acaso no hay ningún profeta del SEÑOR con nosotros? Si es así, podemos preguntarle al SEÑOR por medio de él qué debemos hacer. Uno de los oficiales del rey Joram respondió: Eliseo, hijo de Safat, está entre nosotros… 12 Sí, el SEÑOR habla por medio de él dijo Josafat. NTV. Bajo el reinado de Acab, Moab había estado bajo el control de Israel durante algún tiempo, debido al gran liderazgo militar del monarca israelí. Pero muerto Acab, Mesa, el rey moabita, decidió que había llegado el tiempo inmejorable para rebelarse y dejar de tributar a Israel. Ante la rebelión del monarca moabita, el rey Ocozías no había tomado medidas para frenar la rebelión de Moab. Sin embargo, cuando su hermano Joram llegó al poder, quiso retomar el control sobre Moab, y así, seguir percibiendo los tributos importantes para su reino. Para retomar el control de Moab, Joram, unió fuerzas con Josafat, rey de Judá, y fue a pelear con los moabitas. Los monarcas, para llegar al campamento de los moabitas decidieron tomar el largo camino del sur de Judá hasta el extremo sur del mar Muerto y luego seguir por el borde oriental de Edom. Así no tendrían que enfrentarse con las profundas gargantas y cañones, tales como el valle de Zered cerca de la costa oriental del Mar Muerto. Al pasar por el territorio edomita, no tuvieron dificultad ya que, en aquellos días, Edom era un reino vasallo del reino del sur, por eso: el ejército edomita se les unió en la batalla en contra de Moab. Siete días de rodear por el desierto, en el borde oriental de Edom, la coalición israelí se quedó sin agua para calmar la sed del ejército y de los animales. Los monarcas, habían contado con fuente de agua cerca de los límite territoriales del sur de Edom, pero cuando llegaron vieron que las fuentes estaban completamente secas. Ante la falta de agua, Joram el rey israelita, acusó al eterno Creador de ser el causante de esta tragedia y de haberles dirigido a una muerte segura, olvidándose por completo que esta campaña militar había sido idea suya y no del eterno Creador. En contraste a Joram, Josafat el monarca de Judá creía en el Señor de todo corazón. Cuando surgían dificultades o problemas, sin dudar se dirigía al Dios verdadero para pedirle su dirección. Por eso en medio de este impase, Josafat preguntó: si existía entre ellos un verdadero profeta de Dios a quien consultarle lo que debían de hacer, para salir del embrollo en el cual se encontraban. Uno de los comandantes, le dijo que entre ellos estaba Eliseo, un profeta que había estado bajo la tutela de Elías. Josafat sabía que Eliseo era un hombre de Dios, así es que los tres reyes fueron de inmediato a pedir su dirección. Queridos hermanos, Joram no creía en Dios, pero cuando surgió dificultades en su campaña en contra de Moab, le echó la culpa Él de ser el causante de esta desgracia. Al igual que Joram, gran parte de la población mundial, no creen en la existencia de un único Dios verdadero, por eso viven en conformidad a los deseos perversos de sus corazones. Pero a pesar de no Creer en Dios, las personas; cuando ven el incremento de la maldad, la violencia, la enfermedad, la desigualdad social y los desastres naturales en el planeta, echan la culpa a Dios de todos esos males. Hermanos, Joram planificó su campaña en contra de Moab sin consultar a Dios, pero cuando surgieron las dificultades se olvidó de eso y le culpó. Al igual que Joram, muchos cristianos planifican e inician proyectos sin primero consultar a Dios, pero cuando surgen los primeros inconvenientes, en ese momento se acuerdan de que existe Dios y le claman por ayuda. Para no encontrarnos en un dilema similar, nosotros, antes d --- Send in a voice message: https://podcasters.spotify.com/pod/show/jesus-is-life1/message
