Summary: 2 REYES 5. AL ÚNICO DIOS VERDADERO. 15 … Naamán y todo su grupo regresaron a buscar al hombre de Dios. Se pararon ante él, y Naamán le dijo: Ahora sé que no hay Dios en todo el mundo, excepto en Israel. Así que le ruego que acepte un regalo de su siervo. 16 Pero Eliseo respondió: Tan cierto como que el SEÑOR vive, a quien yo sirvo, no aceptaré ningún regalo… 17 Entonces Naamán le dijo: Está bien, pero permítame por favor cargar dos de mis mulas con tierra de este lugar, y la llevaré a mi casa. A partir de ahora, nunca más presentaré ofrendas quemadas o sacrificios a ningún otro dios que no sea el SEÑOR. NTV. Naamán, el comandante del ejército de Aram, había dado grandes victorias a su pueblo, Con su gran poderío, había derrotado con facilidad a sus enemigos. Pero a Naamán se le presentó una nueva batalla con el peor de sus enemigos, en esta batalla, su fuerza, su poderío y las estrategias militares no le estaban sirviendo de nada. poco a poco estaba siendo derrotado por este enemigo. El enemigo de Naamán era la lepra. Esta enfermedad, muy similar al SIDA de hoy, era una de las enfermedades más temidas de la época. Algunas formas eran extremadamente contagiosas y, en muchos casos, incurables. En el peor de los casos, la lepra ocasionaba la muerte. Por la gravedad de esta enfermedad, muchos leprosos eran forzados a salir de las ciudades a campos abiertos, para que estén en una cuarentena total. Ante esta enfermedad, Naamán había buscado ayuda, en los adivinos, profetas, sacerdotes y dioses paganos de Siria, pero ninguno de ellos, había logrado hacer algo para contrarrestar los efectos de esta terrible enfermedad. Por eso cuando Naamán supo, que había una luz de esperanza en Israel para vencer esta enfermedad, con la venida del rey de Aram, se dirigió a Israel en busca del profeta de Dios. Una vez que Naamán llegó a la morada del profeta Eliseo, recibió órdenes especificas a través del siervo del profeta. El gran héroe, a pesar de no estar seguro de que las instrucciones recibidas iban hacer efecto, lo cumplió por las insistencias de sus siervos que le habían acompañado. Una vez que Naamán terminó de bañarse en el río Jordán, las escamas de la lepra poco a poco fueron cayendo hasta que el cuerpo quedó totalmente limpio de toda llaga. Una vez sano, Naamán regresó donde Eliseo para agradecerle y recompensarle por haberle ayudado. Delante del Profeta, Naamán reconoció que el poder del Dios de Israel le había sanado, por eso declaró: "he aquí ahora conozco que no hay Dios en toda la tierra, sino en Israel" . Además, afirmó que en adelante sólo ofrecería sacrificios al Dios único y verdadero. Ante el ofrecimiento de recompensa, el profeta se negó rotundamente a recibirla. Naamán aceptó la negativa del profeta, pero le pidió permiso para llevar en sus camellos, tierra de aquel lugar, posiblemente para construir un lugar sagrado para adorar a Dios en Siria. Esto refleja la idea de que Dios debe ser adorado en un lugar determinado o en relación con una determinada tierra. Naamán quería adorar al SEÑOR en su territorio, en la tierra de Israel. Queridos hermanos, Naamán antes de conocer el poder sorprendente del eterno Creador, había sido su enemigo y por ende enemigo del pueblo israelita, por ser el capitán del ejército sirio. Pero debido a su enfermedad, pudo conocer al único Dios verdadero, de quien obtuvo su bondad, gracia, misericordia y sanidad. Gracias a estos preciosos regalos, Naamán decidió cambiar por completo su vida de adoración. Decidió desde entonces rendir culto y adoración al único eterno Creador. Hermanos, nosotros antes de conocer a Cristo Jesús, estuvimos infectados por la enfermedad del pecado, pero gracias a la bondad, gracia y misericordia de Dios, fuimos sanados de esta enfermedad y reconciliados para acceder a la vida eterna. Por eso, en gratitud a esas dádivas, al igual que Naamán, nosotros debemos rendir culto y adoración únicamente a nuestro amado Creador. --- Send in a voice message: https://podcasters.spotify.com/pod/show/jesus-is-life1/message
